La sombra de tu voz,
es ahora lo que queda
de lo que fuiste,
el leve susurro del viento
acompaña melódicamente
tú aroma, tu presencia,
lo que ya no eres,
pero solo el hecho de que
fuiste te da existencia.
No eres más
que ese palpitar exacto y motivador
para esos días en donde
me pregunto si he amado.
Si los universos
son creados por amor,
no existirá jamás espacio alguno
o tiempo que puedan decir cuanto
nos amamos.
Si el amor es fuego,
ni mil soles contaran
el amor que vivimos.
Un leve aleteo del viento
entre las hojas que se desprenden
por el otoño,
esta la realidad
de nuestro pasado.
Las hojas caerán
serán hojarasca
y después nadie las
recordará porque
vendrá de nuevo la primavera.
Así de simple y corto
es el amor de los enamorados,
de los amantes.
Breve como la hojarasca
como las llamas
de la misma hojarasca
eterno, hasta cuando
pueda ser eterno
porque eterno no
es por mucho tiempo
sino mientras dure ese fugaz momento.
Hoy te recordé,
esa melodía de hojas
con viento ligero,
fondo azul profundo
decorado de estrellas
tenue frio
me recordó
que fuiste bella,
que fuiste eterna
que fuiste gota
de mar inmenso
donde sucumbieron
mis sueños navegantes.
Me abrace a tu voz frugal
distinta, efímera, pero eterna.
me aferre por una fugaz
ráfaga de luz
a ti.
No sé quién más
te contara de amores,
no sé quién más te dirá
lo que nunca te dije
no sé quien
llevará tu signo
y tú lecho.
Más yo,
desde entonces
te venero como
chispa de vida.
Una ilusión de mi juventud
que me marco de por vida.
Las gotas hechiceras
de la niebla anuncian
que amanece.
Te recuerdo,
pero no como antes.
antes sufría,
ahora bendigo tu amor
tu nombre abstracto.
Recordar la hecatombe,
que vibre como nadie
porque ame
más de lo normal
por eso soy naufrago
errante,
como tú,
aunque no sabes
Quien y que eres.
#edgarlopez
